El desarrollo personal es importante, ser conscientes de cómo actuar para ayudar a los niños y adolescentes a tener ese crecimiento, nos permitirá tener la tranquilidad de saber que se están encaminando para un futuro de bienestar.
En este artículo queremos presentarte 3 consejos que consideramos fundamentales para incentivar a tus hijos a crecer en conocimiento, habilidades, e incluso a detectar sus debilidades para superarlas o convertirlas en fortalezas.
#1: Promueve el autoconocimiento
Es necesario que los niños y adolescentes se conozcan así mismos, y para ello es necesario reciban orientación por parte de sus padres.
De igual forma los docentes o educadores pueden ayudarles. Hay que tener en cuenta que tanto niños como adolescentes son esponjas de aprendizajes.
Están en una etapa de desarrollo físico y psicológico, en constante definición de la personalidad, así que es de gran importancia que los padres se involucren promoviendo el autoconocimiento.
Para ello puedes explorar junto a tus hijos sus preferencias y puntos fuertes, ayudarles a descubrir o identificar sus habilidades, qué les gusta, sus pasiones, intereses, sueños y objetivos.
En especial, durante la etapa de la adolescencia, se da la llamada crisis de identidad, y en la búsqueda de ésta puede haber altibajos que podrían entorpecer el desarrollo personal.
Los adolescentes son más vulnerables y reactivos ante todo tipo de eventos, experimentan emociones con gran intensidad indiferentemente del estímulo.
De manera que, una forma de motivar el desarrollo personal en niños y adolescentes es estimulándolos a reflexionar sobre sus creencias e ideas, lo que origina autoconocimiento.
#2: Enséñales a tomar decisiones
Permitir espacios y escenarios para la autonomía de los niños y adolescentes les ayuda también con el desarrollo personal. De lo contrario, serán incapaces de tomar decisiones para el bienestar propio.
Hay que dejar que se equivoquen, que aprendan a reconocer y descubrir lecciones a partir de sus errores, que puedan hacer críticas constructivas y estar dispuestos a seguir intentándolo.
Esto significa que, al permitirles cometer errores, o tomar decisiones, no debemos dejarlos solos, se les puede acompañar, hacer seguimiento, y estar atentos para ayudarles a comprender las consecuencias o resultados de sus decisiones.
Es así como podrán crecer con más seguridad en sí, y esto ayuda con el desarrollo personal, les permite desarrollar mejores actitudes, y reconocer la importancia de la dedicación y la constancia.
#3: Motivarlos a fijarse objetivos
Los objetivos incentivan el desarrollo o crecimiento personal. Puedes fijarles objetivos simples o pequeños, siempre ajustados a la etapa y edad en la que se encuentren.
A medida que van creciendo se les puede ir ajustando los objetivos, incrementando la dificultad, de manera que sean retos que les impulse y les ayude también a descubrir nuevas habilidades.
Para los niños les puedes fijar objetivos como recoger sus juguetes, organizar sus espacios de juego, estudio y dormitorio, comer toda la comida, entre otros.
Para los adolescentes pueden ser objetivos académicos, deportivos, y más. En el caso de ellos las tareas deben ser más complejas.
También puedes conversar con ellos para ayudarles a descubrir los objetivos que quieren trazarse a corto, mediano y largo plazo, y orientarles respecto a cómo pueden elaborar una estrategia para cumplirlos.
Enseñarles a tener objetivos en la vida será un gran beneficio para ellos en todas las etapas de sus vidas, eso les ayudará a ser resilientes, constantes, y buscar soluciones creativas ante los obstáculos que se interpongan en el camino hacia el logro de los objetivos.
Ten en cuenta estos tres consejos y podrás motivar el desarrollo personal en tus hijos. En el Buckingham School también implementamos estrategias pedagógicas para ayudarles.