La semana pasada vivimos nuestro Robobuck 9.0 en Buckingham School, un espacio que se celebra desde hace más de una década, donde estudiantes de entre 10 y 18 años se reúnen para mostrar su creatividad y habilidades en robótica, tecnología y programación. Pero ¿por qué enseñar robótica en el aula?
En Buckingham School uno de nuestros valores fundamentales es la innovación. Estamos convencidos de que debemos preparar a nuestros estudiantes para un futuro tecnológico en constante cambio. Además, no sólo ayuda a desarrollar habilidades técnicas, sino también sociales y de trabajo en equipo. Obtenga más información a continuación.
¿Qué es la robótica educativa?
Es una disciplina que utiliza la tecnología robótica como herramienta para promover el aprendizaje y el desarrollo de habilidades en los estudiantes. Se centra en la integración de conceptos de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM) mediante la construcción, programación y manipulación de robots.
Además de enseñar aspectos técnicos, promueve habilidades como el pensamiento crítico, la resolución de problemas, la creatividad y el trabajo en equipo. Al combinar la teoría con la práctica, los estudiantes obtienen conocimientos de una manera más significativa y se preparan para enfrentar los desafíos del mundo actual.
¿Por qué enseñar robótica en el aula?
“Para Buckingham School, enseñar robótica es fundamental, ya que brinda a los estudiantes la oportunidad de desarrollar habilidades esenciales para el siglo XXI. No solo les ofrece conocimientos prácticos en áreas de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM), sino que también fomenta el pensamiento crítico, la creatividad y la resolución de problemas”, explica David Patiño, profesor de diseño tecnológico del PEP y del PAI del colegio. .
“Estas habilidades, alineadas con la filosofía del IB de desarrollar mentes curiosas, motivadas e informadas, preparan a los estudiantes para enfrentar los desafíos del mundo actual, un mundo cada vez más influenciado por la tecnología”, agrega el docente.
5 razones para enseñar robótica en el aula
1. Fomenta el pensamiento crítico
El mundo tecnológico en el que vivimos requiere que los estudiantes enfrenten problemas complejos y encuentren soluciones utilizando un enfoque sistemático. Desde el diseño del robot hasta la programación y la resolución de problemas, los estudiantes deben pensar de manera lógica y crítica para superar los desafíos.
2. Promueve la creatividad
La robótica ofrece a los estudiantes la oportunidad de crear y diseñar soluciones únicas para problemas específicos. No existe una única forma de abordar un problema en robótica, lo que fomenta la experimentación y la creatividad en el diseño e implementación de soluciones.
3. Prepárate para el futuro
En un mundo cada vez más impulsado por la tecnología, las habilidades en robótica son muy valoradas en diversas industrias, como la ingeniería, la medicina, la manufactura y la informática. Al enseñar este tipo de tecnología en el aula, los estudiantes adquieren habilidades técnicas y de resolución de problemas que son esenciales para el éxito en el futuro mercado laboral.
4. Promueve el trabajo en equipo
Muchos proyectos de robótica requieren colaboración en equipo, donde los estudiantes deben comunicarse de manera efectiva, distribuir tareas y trabajar juntos para lograr un objetivo común. Esta experiencia fomenta habilidades de trabajo en equipo que son esenciales en el ámbito laboral y en la vida cotidiana.
5. Aplicar conceptos STEM de forma práctica
La robótica integra los principios de la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas de forma práctica y tangible. Los estudiantes no sólo aprenden estos conceptos en teoría, sino que también los aplican en la práctica al diseñar, construir y programar robots. Esta aplicación práctica ayuda a reforzar la comprensión de los conceptos y su relevancia en el mundo real.
Es crucial que todos los colegios fomenten la participación de nuestros estudiantes en actividades de robótica , programación y tecnología, que promuevan el trabajo en equipo, la sana competencia y la innovación, formando líderes para un futuro cada vez más tecnológico.
